La semana laboral de cuatro días supone un compromiso institucional, social y ambiental al fomentar el bienestar de las personas y la lucha contra el cambio climático desde la Fundación
Los múltiples beneficios refuerzan la capacidad de la Fundación para conciliar la vida laboral, familiar y social y el activismo climático
Se inicia también un periodo de análisis y estudio de los resultados de la semana de cuatro días y de sus implicaciones ambientales, sociales y económicas
Madrid. Jueves, 5 de octubre de 2023. La Fundación Renovables aprobó aplicar, desde inicios de julio, la semana laboral de cuatro días, buscando una mejora del bienestar del equipo de trabajo y contribuyendo, al mismo tiempo, en la lucha contra el cambio climático a nivel institucional. El Patronato de la Fundación tomó esta decisión tras analizar el desempeño del personal de la Fundación Renovables y los resultados obtenidos desde 2021, cuando se implantó un modelo mixto, presencial con días de teletrabajo. La iniciativa aprobada ha ganado impulso en los últimos años por un conjunto de beneficios significativos, tanto en términos de productividad como de sostenibilidad y bienestar de los empleados. Esta medida coincide con la aplicación de soluciones que proponemos en nuestros informes de política energética y está en línea con la implementación de una nueva cultura de la energía, como la Fundación viene solicitando desde su creación.
Fernando Ferrando, presidente de la Fundación Renovables, valora que “para nosotros es consecuencia del reconocimiento de la labor y desempeño de las personas que trabajan en la Fundación, con el objetivo de comprobar de forma real que es posible seguir cumpliendo con nuestros compromisos y disponer de más tiempo libre”.
La Fundación Renovables siempre ha estado comprometida con la sostenibilidad y el compromiso social. En este sentido, la implementación de una semana laboral de cuatro días es el paso siguiente lógico al teletrabajo, que ya estaba implementado de manera parcial, pues se alinea perfectamente con el compromiso de la Fundación al reducir el impacto ambiental asociado con las actividades diarias y la movilidad desde casa a la oficina, lo que a su vez se traduce en una disminución en el uso de energía, en el consumo de recursos y en las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera asociadas al trabajo de la Fundación.
Con la implantación de la semana de cuatro días hemos iniciado, paralelamente, un trabajo de análisis de un período de un año sobre las ventajas e inconvenientes que introduce en el desarrollo de los trabajos, en la fidelización de los trabajadores, en el ahorro de energía y en la mejora del impacto ambiental y del bienestar del equipo de trabajo. El fin es exteriorizar los resultados para que se puedan implementar en otras organizaciones y empresas. Por el momento, en estos tres primeros meses el resultado es altamente positivo.
Raquel Paule, directora de la Fundación Renovables, comenta que “la jornada de cuatro días me da la oportunidad de llevar un día a la semana a los niños al cole y hacerlo sin prisas. También me facilita la carga del hogar, algo que se traduce en una mejora en la calidad de vida de toda la familia, con la mayoría de las cosas hechas, puedo dedicarles más tiempo. A nivel profesional está siendo muy positiva, el equipo viene con más motivación y ganas. El tener un día menos de trabajo nos ha permitido parar y pensar, algo que con el ritmo que llevábamos antes no nos podíamos permitir. Y hemos conseguido que ahora en la Fundación Renovables trabajemos de forma más estratégica e inteligente para seguir haciendo todo lo que hacíamos, pero trabajando un día menos.”
Desde su implantación el 1 de julio, estamos comprobando que la productividad no solo no se ha visto reducida, sino que se ha incrementado. Aunque pueda parecer contradictorio, trabajar un día menos a la semana implica una mayor concentración y por tanta una ejecución más eficiente de las tareas, por lo que el trabajo al que se ha comprometido la Fundación Renovables no resulta afectado, sino potenciado.
El bienestar de los empleados y la mejora de la conciliación es esencial para cualquier organización y también para la Fundación Renovables. La semana laboral de cuatro días contribuye a mejorar el equilibrio entre el trabajo y la vida personal de los empleados, lo que a su vez aumenta su satisfacción laboral y reduce el agotamiento acumulado. Esto se traduce en una mayor fidelización de los empleados, en menores costes de capacitación y en un equipo de trabajo más comprometido y saludable. Además, al ofrecer a los empleados más tiempo libre, estos pueden aumentar su participación activa en iniciativas sociales y ciudadanas y en proyectos de voluntariado, lo que refuerza el compromiso de la Fundación con sus objetivos.
En resumen, la implementación de una semana laboral de cuatro días está aumentando la productividad y la eficiencia de los empleados, reduciendo el impacto ambiental de los desplazamientos diarios y mejorando el bienestar laboral y la conciliación social y familiar. Estos beneficios no solo fortalecen la capacidad de la Fundación para lograr su objetivo de promover el cambio de modelo energético, sino que también contribuyen a crear un entorno de trabajo más saludable, sólido y sostenible.
